Convento de El Hoyo



“Que en el año del señor de 1399 ya se habla de él, y en el archivo de Gata se ve una escritura por la cual sabemos que en aquella sazón había en este santo eremitorio un ermitaño honrado de santa vida natural de Ciudad Rodrigo, llamado Alonso Rodríguez” Por primera vez se citó el convento como tal el 28 de diciembre del año 1432 en una bula del Papa Eugenio IV. El edificio inicial era sin duda muy pobre y a mediados del Siglo XVI estaba viejo y ruinoso. Por eso Moles indica que se rehízo en la segunda mitad de la citada centuria, los claustros se alzaron de nueva planta, y también la iglesia derribándose la vieja. Todo ello fue posible gracias a la ayuda del rey Felipe II y de la orden de Alcántara. El convento se compone de regulares celdas, tránsitos y dependencias bien ordenadas y construidas. La iglesia era hermosa, con atrevida bóveda de cantería espaciosa, sólida y elegante en su conjunto. En un camarín que estuvo sobre el altar mayor, cubierto de bonitos azulejos que tuvo también su altar para celebrar en él, en este se encontraba Nuestra Señora de Monteceli. Y en la capilla mayor, en dos altares laterales, en el de la derecha San Francisco, Santa Rosa de Viterbo y San Pedro de Alcántara, y en el de la izquierda, un niño Jesús, San Pascual y San Antonio. Era notable su sillería tallada, que una partida de carabineros (Los carabineros son del siglo XIX, no viene claro si son franceses o no, se puede intuir.) quemó en medio de la iglesia.

Unnamed Road, 10860 Gata, Cáceres, España