La consejera de Cultura señala que los trabajos de exhumación en fosas del franquismo son una cuestión de dignidad, justicia y humanidad

Durante la visita la consejera ha señalado que a través de estos trabajos “se está dando dignidad y justicia a unas personas que no sabían dónde estaban sus familiares” y que se trata de una “cuestión de humanidad”.

“Seguiremos trabajando en esta línea, es tiempo de dar dignidad a tantos familiares para que puedan llorar a sus seres queridos donde quieran”, ha añadido.

La intervención arqueológica en el Pozo de Salamanco Chico ha permitido localizar los cuerpos de varias personas represaliadas en los primeros días de la Guerra Civil, de los que se tenía constancia a través de testimonios orales.

El pozo se encuentra en el término municipal de La Parra, aunque por su proximidad a Feria y por el origen de las víctimas se relaciona con esta última localidad.

Los trabajos, que dirige la arqueóloga Lourdes Herrasti, de la Sociedad Científica Aranzadi, se han extendido durante varias semanas debido a la dificultad de hallar los cuerpos, que se encontraban ocultos bajo un potente sedimento de escombros y piedras de gran tamaño.

Algunos restos aislados han ido aflorando previamente, pero ha sido, una vez bombeada el agua existente y retirado todo el relleno de escombros, cuando se ha localizado una gran cantidad de restos humanos.

Los testimonios recogidos por los historiadores cifran en torno a veinte las personas que habrían sido arrojadas al pozo entre agosto y septiembre de 1936.

La extracción de los restos se ha realizado con la presencia de los familiares, algunos de ellos descendientes directos de las víctimas, que, en algunos casos, cuentan con más de 90 años de edad.

Trabajos posteriores de análisis antropológico y genómico permitirán, en su caso, determinar el número exacto de víctimas, su identificación y la entrega de restos a sus familiares.

Fue a instancia de estos familiares como se iniciaron las actuaciones en el Pozo de Salamanco Chico en 2012, cuando, gracias al empleo de cámaras submarinas, se detectaron los primeros vestigios que permitieron certificar la existencia de restos humanos. En aquella ocasión los trabajos se realizaron bajo la supervisión del Proyecto para la Recuperación de la Memoria Histórica de Extremadura (PREMHEX).

En la localidad de Feria se han realizado, entre 2015 y 2018, otros trabajos de exhumación de fosas de víctimas de la Guerra Civil y la represión franquista situadas en el cementerio municipal, que culminaron con el hallazgo de varios cuerpos. El número de víctimas que produjo la represión en Feria se estima en unas 80 personas.

La actuación en el Pozo de Salamanco Chico se enmarcan en la campaña de exhumaciones que está realizando la Consejería de Cultura, Turismo y Deportes durante este año con un presupuesto de 90.000 euros, que incluye también actuaciones en municipios como Miajadas o Castuera, donde ya han concluido los trabajos de campo, también con resultados positivos.

En la visita han participado, entre otros, el director general de Bibliotecas, Archivos y Patrimonio Cultural, Francisco Pérez Urbán'; el jefe de Servicio de Memoria Histórica y Democrática, Francisco Javier Jiménez Ávila; la alcaldesa de Feria, Manuela Cornejo; y familiares de los represaliados en el Pozo de Salamanco Chico.

ACTUACIONES EN FOSAS DURANTE 2021

En 2021 se han realizado y planificado en Extremadura actuaciones en materia de exhumación de fosas de la Guerra Civil y el franquismo en localidades como Miajadas, Navalmoral de la Mata, Piedras Albas, Valencia de Alcántara, Zarza de Granadilla, Zarza la Mayor, Badajoz, Cabeza la Vaca, Castuera, Feria, Fregenal de la Sierra, Fuentes de León, Medellín, Santa Amalia y Villanueva de la Serena.

Estos trabajos están financiados por la Secretaría de Estado de Memoria Democrática y la Junta de Extremadura con un presupuesto de 424.000 euros, y se realizan en colaboración con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), el PREMHEX, ayuntamientos, y asociaciones memorialistas.