El teatro extremeño baja el telón del Festival de Mérida con un clamor de libertad, igualdad y dignidad de las mujeres

Esta obra, ha dicho García Cabezas, es “un grito pidiendo asilo, pidiendo una sepultura digna”, una reivindicación por los derechos de las mujeres que se hizo hace veinticinco siglos, pero que está de “absoluta vigencia, como podemos comprobar estos días con las mujeres afganas que levantan su voz para no perder sus derechos”.

La responsable de la Secretaría General de Cultura ha afirmado que estas propuestas son “más necesarias que nunca” y ha subrayado el papel del teatro y de la cultura como “reivindicación, como instrumento para luchar contra las injusticias y como arma para lograr la igualdad”.

Miriam García Cabezas ha agradecido la valía de esta compañía por este “montaje valiente” escrito por Silvia Zarco, con dirección de Eva Romero y con un gran elenco conformado por una treintena de actores y actrices, en su gran mayoría extremeños.

Entre esos intérpretes se hallan Cándido Gómez, Carolina Rocha, David Gutiérrez, Eduardo Cervera, Valentín Paredes, María Garralón, Rubén Lanchazo, Javier Herrera o la cantaora Celia Romero, así como un gran coro repleto de actores y actrices extremeños que conocen este certamen.

Del coro de Danaides forman parte Laura Moreira, Pilar Brinquete, Nuria Cuadrado, Gema Ortiz Iglesias, María Valero, Ruth Frutos, Maribel Lozano Capote, Nieves Gonzálvez, Silvia Gómez y María Cendrero.

El coro de madres está integrado por Beli Cienfuegos, Raquel Bravo, Maite Vallecillo, Manola Tejada, M. Victoria Cerrato y María Eugenia González; mientras que del coro de egipcios y soldados forman parte Eduardo Cervera, Rubén Lanchazo, Javier Herrera, Alberto Serrano, Juanan Cardoso, Nandy López y Tomás Casatejada.

También se cuenta con la participación del Coro Amadeus In, la Escuela Municipal de Teatro de Guareña y la Asociación Cultural Párodos de Talarrubias.

BUEN ESTADO DE FORMA DEL TEATRO EXTREMEÑO

La secretaria general de Cultura, Miriam García Cabezas, ha destacado “la buena calidad y el buen estado de forma del teatro extremeño”, que tiene en el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida una “magnífica plataforma para exponer el talento” del sector escénico regional.

En este sentido ha ahondado en esta cuestión señalando que, gracias a este certamen, así como a la apuesta de la Consejería de Cultura, Turismo y Deportes, el teatro extremeño “no se queda aquí, sino que sale fuera, exportando también la marca Extremadura”.

En la misma línea se ha expresado el director del Festival de Mérida, Jesús Cimarro, destacando que el sello extremeño es también una de las “señas de identidad” de este festival.

Cimarro ha señalado que ‘Las suplicantes’ es un “proyecto creado cien por cien por mujeres”, en el que se visibiliza a la mujer en las artes escénicas y “la igualdad en toda la cadena escénica”.

Por otra parte, el director del certamen ha mostrado su satisfacción por los cinco llenos, sobre el aforo permitido, que ha cosechado ‘Edipo’, con 10.187 espectadores en las cinco representaciones.

Eva Romero, directora de ‘Las suplicantes’, ha apuntado que esta obra es “un sueño de lucha colectiva trenzada entre mujeres que exigen su derecho a decidir, que exigen libertad para ser dueñas de su destino y de hombres sensibles que las acompañan”. ‘Las suplicantes’ tiene “un pie en la poesía y otro en la vida; un pie en el pasado y otro en el presente”, ha aseverado Romero.

La obra es una versión libre escrita por la profesora Silvia Zarco sobre obras homónimas de Esquilo y Eurípides escritas hace veinticinco siglos, pero que tiene “absoluta vigencia” hoy en día.

Se trata de una propuesta protagonizada por mujeres que reclaman libertad para elegir su destino, igualdad y dignidad para enterrar a muertos, “la tragedia late en el presente, los muertos nos interpelan y son las mujeres las que demandan”, y esta obra quiere hacerse eco de ese llanto colectivo para “sembrar semillas de reflexión”, ha señalado Eva Romero.

Por su parte, la autora del texto, Silvia Zarco, ha explicado que “en estos tiempos pandémicos buceé en los clásicos griegos para buscar historias de responsabilidad colectiva y de despedidas dignas”, y se encontró con estas dos obras homónimas que “eran historias colectivas” en su mayoría femeninas pero siempre apoyadas por “hombres de labios libres”, como los definió Esquilo, que apoyan su lucha.

CINEMA AESTAS

En cuanto a otras actividades englobadas en el Festival de Mérida, Jesús Cimarro ha recordado que esta noche concluyen las proyecciones del ciclo ‘Cinema Aestas: Mare Nostrum’, con la película francesa ‘La casa junto al mar (La Villa)’, de Robert Guedigian, a las 22:30 horas en el Pórtico del Foro.