La Junta implantará a mediados de 2019 el sistema ‘puerta a puerta’ en cinco municipios extremeños

En la recogida selectiva “puerta a puerta” los ciudadanos y comercios efectúan la segregación de las distintas fracciones de residuos domésticos en origen (materia orgánica, papel-cartón, vidrio, envases ligeros y fracción resto); pero –en lugar de depositarlos en unos contenedores que, de forma permanente permanecen en la vía pública– los residuos, debidamente separados, son recogidos diariamente en la puerta de su domicilio, de acuerdo con un calendario previamente establecido.

El ciudadano hará la separación de los residuos en su domicilio, tal como lo hacía siempre separando, además, los residuos orgánicos en un pequeño cubo marrón aireado de uso domiciliario, que se le entregará, junto con las bolsas compostables a utilizar en el mismo.

Con el fin de facilitar a los ciudadanos y comercios su participación en este nuevo sistema, se les entrega dos cubos para sacar a la calle los residuos correspondientes a cada día, uno marrón para los residuos orgánicos y un cubo gris polivalente para depositar en él las otras fracciones de residuos cuando corresponda. Los cubos vendrán equipados con etiquetas RFID, que identificarán los residuos con el hogar que los genera.

Diariamente, se recogen los pañales y heces de animales domésticos de forma separada en bolsa de plástico. Cuando el ciudadano no pueda depositar los residuos en la puerta de su domicilio, en el horario y días establecidos, podrá depositarlos en la denominada área de emergencia de su municipio, con acceso restringido a través de tarjeta personal para comprobar que el ciudadano utiliza el servicio correctamente.

Mediante el modelo “puerta a puerta” se consigue la participación de todos los vecinos en la recogida separada de residuos, lo cual permite la recuperación de los distintos materiales contenidos en los residuos: papel y cartón, metales, plásticos, vidrio y materia orgánica.

Se logra así disminuir la cantidad de residuos eliminada en vertederos o incinerada, aumentando los recursos obtenidos de los residuos, avanzando hacia una economía verde y circular generadora de empleo y riqueza para la región de una manera respetuosa con su medio ambiente.

Este modelo, de fácil implantación en municipios rurales y semiurbanos, ha logrado los mayores índices de recogida separada de residuos en numerosas zonas de Europa, incluso en grandes ciudades como es el caso de Milán.

DATOS

Actualmente, el 17 por ciento de los residuos municipales generados en la región se recogen separadamente, pero aún se está lejos de cumplir los objetivos establecidos por la Unión Europea en la Directiva Marco de Residuos, los cuales obligan a reciclar en 2020 el 50 por ciento, cifra que se elevará gradualmente hasta alcanzar el 65 por ciento en 2035.

Además, se está tramitando el proyecto de modificación de la Ley 22/2011, de residuos y suelos contaminados, en el que se destaca que los municipios de más de 5.000 habitantes de derecho instaurarán la recogida separada de los biorresiduos en el servicio de gestión de residuos municipales antes del 31 de diciembre de 2020 y el resto de municipios deberá establecerla antes del 31 de diciembre de 2023.