224 personas con alguna discapacidad han sido contratadas por ayuntamientos cacereños en el marco del programa Diputación Integra

Diputación Integra nacía, hace casi un año, con el objetivo de facilitar la contratación en el mundo rural de personas con alguna discapacidad, avanzando así en la “igualdad real”, tal como dijo en su día la presidenta de la Diputación de Cáceres, Rosario Cordero.

Este jueves, transcurrido ya un tiempo, la presidenta provincial se ha reunido con las asociaciones que colaboran en este programa para hacer balance del mismo, un balance que “es muy satisfactorio”, ha dicho Cordero, en base a datos como las 224 personas con distintas capacidades que han sido contratadas por los ayuntamientos, permitiendo que puedan permanecer en sus pueblos y ayudando a que obtengan cierta independencia.

Las asociaciones que, desde un principio, han asesorado y colaborado con la Diputación y ayuntamientos para adaptar los puestos a las distintas capacidades, así como en el acompañamiento, cuando ha sido necesario, son la Asociación para la Integración de Discapacitados Intelectuales de la Mancomunidad Sierra de San Pedro, AIDIM; la Asociación de Padres y Madres del Taller Ocupacional de Navalmoral de la Mata, APTO; Asociación Comarcal de Discapacitados Físicos y Psíquicos de Las Villluercas, ASDIVI; Asociación de Padres para la Integración en Cáceres, ASPAINCA; Mensajeros de la Paz, y la asociación placentina en favor de las Personas con Discapacidad Intelectual, PLACEAT.

La presidenta ha insistido en que este proyecto, que ha contado con un presupuesto de 1.500.000 euros, “ha permitido que personas con distintas capacidades hayan conseguido un trabajo, se levanten cada día con un objetivo laboral, teniendo en cuenta que muchas de ellas nunca habían trabajado, porque si es difícil para cualquier hombre o mujer acceder al mundo laboral, mucho más para estas personas”.

A partir de aquí, la Diputación y las asociaciones ya trabajan para diseñar la segunda edición de Diputación Integra, “porque tiene que tener continuidad -ha apuntado Cordero-, hemos visto todo lo que nos aportan, y no hablo solo de su trabajo, sino de su sensibilidad; nos recuerdan cada día que hay que atender a este colectivo, porque hay que trabajar por todas las personas, tengan unas capacidades u otras”.

Por último, la presidenta ha recordado que la Institución provincial cuenta con dos trabajadores, “Carlos y Consuelo”, que comenzaron tras un convenio de colaboración con ASPACE y Síndrome de Down. “Cuando lo hicimos y vimos cómo funcionaba, pensamos que si la Diputación podía, también los ayuntamientos, y lo harían con nuestro apoyo”.