La secretaria general de Cultura define la muestra escultórica "Identitas" como "un diálogo entre autores"
- Publicado: 12/01/2018 16:49
- por: extremadura.com
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La secretaria general de Cultura, Miriam García Cabezas, ha inaugurado en la Sala de exposiciones del Archivo Histórico Provincial de Cáceres la muestra ‘Identitas’, un proyecto expositivo surgido en el seno de la Dirección General de Bibliotecas, Museos y Patrimonio Cultural de la Consejería de Cultura e Igualdad con el propósito de dar apoyo y divulgar la obra de los artistas extremeños acercando el arte a la sociedad.
La muestra escultórica ‘Identitas”, de los artistas Juan Gila y Jorge Gil, ha podido verse recientemente en la Sala Europa de Badajoz y permanecerá expuesta hasta el 25 de febrero en el Archivo de la capital cacereña.
‘Identitas’ es “un proyecto que plantea la vigente preocupación de muchos artistas por la búsqueda del ‘yo’ y del ‘otro’”, según ha señalado la secretaria general de Cultura. “La curiosidad del ser humano es infinita y el estudio de sí mismo no deja de sorprendernos en ningún ámbito de la ciencia y la investigación. Y eso es lo que han hecho Juan Gila y Jorge Gil en este diálogo de autores en el que se ha convertido ‘Identitas’, siempre con el fin de acercarse a la realidad, de esa ‘identidad’, en una época tan convulsa y complicada como la que vivimos”, ha apuntado García Cabezas.
“Si bien se han conquistado posiciones que eran en apariencia inconquistables años atrás, todavía quedan muchísimos pasos por dar y divisiones que superar. Y de esto hablan Juan Gila y Jorge Gil, a través de unas obras que se han nutrido de sus propias experiencias, presentando un juego que reflexiona sobre la desconexión entre los diferentes mundos del ser humano y las diferencias que la sociedad impone con sus convencionalismos y obsoletas presiones”, ha añadido García Cabezas.
Objetivos culturales
Miriam García ha apuntado que “uno de los firmes propósitos de esta Consejería es impulsar proyectos culturales como el que hoy presentamos, proyectos enriquecedores y atractivos, que dignifican y acercan al público nuestro patrimonio más contemporáneo”, ha afirmado.
García Cabezas ha puesto el acento en la importancia de la cultura y sus expresiones, señalando que “uno de los máximos exponentes y valores indicativos del grado de evolución de una comunidad o un pueblo es el respeto por su patrimonio, la defensa a ultranza de su pasado y el firme impulso hacia un inminente y renovador futuro siempre con un único fin: el acrecentamiento de su riqueza cultural como base de progreso”.
La secretaria ha concluido su intervención señalando que “la Cultura no se circunscribe a unos ámbitos delimitados, sino que ha de medirse en términos de máxima difusión y llegar al mayor número de campos, intereses y personas”.
Autores
Juan Gila (Zafra, 1964) y Jorge Gil (Jaca, 1981) son los dos artistas que se funden en este proyecto expositivo que tiene como protagonista a la figura humana y al “ser” en toda su esencia, construyendo narraciones visuales que recogen más parámetros que los meramente visuales, anudando reflexiones y proponiendo incertidumbres, generando modos posibles de entender la realidad y promoviendo la capacidad de interpretación y análisis de la propia obra, permitiendo un tránsito dúctil hacia el trabajo conceptual y personal de los autores en su creación.
Estos escultores se convierten casi en “arquitectos” de los espacios interiores del cuerpo, transformándolos en paisajes humanos, y presentan un significado sincero, desde la propia óptica y análisis interpretativo del espectador, enriqueciendo su imaginario personal como sustrato simbólico del conocimiento.
Para ellos, la base de su trabajo es el ser humano. El cuerpo es la expresión inmediata de las pasiones, deseos y odios; a través del cuerpo se manifiestan las diferentes sensaciones, presentándolo como objeto ajeno a su pretendida esencia. Toman el cuerpo como espacio teatral, como campo de sugerencias, de estímulos, insinuaciones, experimentación y emociones.
Inolvidable y siempre original, el mundo de Juan Gila se revela en las pequeñas piezas con tanta grandeza como en las obras mayores. Cargado de sugerencias, su universo es ágil, rico en matices y generoso en expresividad. Como si se nutriese de un fértil imaginario imposible de agotar, cada personaje llama al siguiente, y juntos entonan un canto feliz. Así es como inventa una realidad soñada, poética y mágica, en la que el hombre adquiere un perfil característico e identificado como algo sublime.
Acercarse a la obra de Jorge Gil es una experiencia apasionante, enigmática y misteriosa a la vez. La fuerza de sus representaciones, las ideas y contenidos que fluyen de sus piezas tienen una inquietante atracción, estimulan al espectador y le hacen cómplice de aquello que nos quiere contar. Su fórmula se fundamenta en generar preguntas al que observa. Todo un reto superado con creces ante la banalidad imperante en la mayoría del arte actual.