El IMEX pone en marcha el proyecto EMMA para la inserción laboral de mujeres en situación de discriminación múltiple

El proyecto tiene como objetivo el aumentar la integración sociolaboral de las personas pertenecientes a los colectivos más vulnerables, a través de actuaciones que fomenten la igualdad de género y la conciliación de la vida personal y laboral, evitando a la vez la discriminación múltiple.

Dicha discriminación se refiere a una situación de desventaja social debido a la concurrencia en una misma persona o grupo social de más de un factor que puede dar lugar a ello, según explicó Elisa Barrientos, quien señaló que el riesgo de exclusión se incrementa en casos de personas que sufren esta situación, como aquellas mujeres que tienen alguna discapacidad, son inmigrantes o pertenecen a alguna minoría étnica.

El proyecto EMMA pretende desarrollar acciones de orientación para el empleo y la formación, así como prestar acompañamiento a mujeres pertenecientes a colectivos en riesgo de pobreza o exclusión social con necesidades específicas asociadas a la múltiple discriminación.

PERFILES

Elisa Barrientos explicó que dentro de las mujeres con alguna discapacidad, el perfil de las desempleadas corresponde a mujeres de entre 25 y 45 años de edad, con bajo nivel de cualificación, y que llevan demandando un empleo desde hace más de doce meses y añadió que en Extremadura un 44 por ciento de las personas con discapacidad son mujeres.

Respecto a minorías étnicas, Barrientos indicó que la más numerosa es la gitana, y explicó que en Extremadura hay unas 15.000 personas gitanas. La directora general del IMEX destacó que se trata de mujeres con un bajo nivel e instrucción, escasa cualificación profesional y víctimas de un proteccionismo mal entendido del pueblo gitano hacia ellas, al tiempo que tienen poca representatividad en espacios de decisión.

Por otra parte, unas 2.205 personas con nacionalidad extranjera se instalaron en Extremadura en 2016 y se sabe que las mujeres inmigrantes se encuentran en un situación de aguda precariedad laboral , económica y social, nacida de dinámicas desiguales de clase , género y etnia, que las convierten en el último escalón de la estructura social y laboral en España, según la directora del IMEX.

Por todo ello, era necesario un proyecto como el EMMA, según Elisa Barrientos, ya que va a mejorar la capacitación y la motivación de estas mujeres, facilitando herramientas para que las administraciones y organizaciones que trabajan en el campo del empleo y en la atención a mujeres que presentan esta múltiple discriminación sean capaces de incentivar “la relación autoestima e inserción laboral”.

El proyecto contempla una serie de acciones, la primera de ellas el desarrollo de un diagnóstico de la situación de las mujeres que residen en Extremadura y que están en riesgo de exclusión social; la segunda acción pretende la actualización de los recursos de interés e información que pueden ser útiles para estos grupos; y la tercera es la celebración de 18 talleres formativos para 180 mujeres que sean inmigrantes, discapacitadas, pertenecientes a minorías étnicas o víctimas de Violencia de Género y que se desarrollarán en diferentes puntos de la comunidad autónoma.

Además, el proyecto recoge la impartición de formación básica y avanzada para el personal técnico que atiende a mujeres pertenecientes a los citados colectivos, con la celebración de 6 cursos de 25 horas de duración cada uno, en Mérida, Badajoz, Cáceres, Plasencia, Zafra y Navalmoral de la Mata.

La primera fase del proyecto, iniciada el pasado mes de septiembre, concluirá en diciembre de 2017, y la segunda, dedicada a hacer un seguimiento de su puesta en marcha, irá desde enero hasta diciembre de 2018.