Hoy se han entregado en la Diputación de Badajoz los III Premios de Fotografía Sin Barreras

El acto congregó al los presidentes de la Institución Provincial, Miguel Ángel Gallardo; de APAMEX, Jesús Gumiel, y el diputado de Fomento, Saturnino Alcázar. También estuvieron presentes los tres ganadores: Pako Pimienta, primer premio por la fotografía “Alas para volar”, Pedro Javier Reig que ha obtenido el segundo premio por “Arte a todos los niveles”, y Ana Navas, tercera clasificada por la fotografía “Mamá por qué dices que es diferente”.

El presidente de la Diputación, Miguel Ángel Gallardo, destacó en su intervención el compromiso de la institución con la accesibilidad “que significa avanzar hacia la igualdad”. En este sentido, recordó que los presupuestos de la Diputación recogen una partida para que los pueblos puedan hacer obras de accesibilidad. “Y esta partida quiere ser complementada por premio de fotografía que da visibilidad a esa accesibilidad”. También señaló que “todos tenemos alguna discapacidad que nos impide hacer una tarea cotidiana y lo que tenemos es que trabajar por las capacidades que tienen estas personas y apoyar su espíritu de superación”.

Gallardo tuvo un recuerdo especial al inicio de su intervención contra 'el terrorismo machista' que ayer se cobró otras dos vidas en nuestro país y apostó por un pacto social contra esta lacra.

Jesús Gumiel agradeció la consolidación de estos premios en los que cada vez participan más trabajos y de mayor nivel. Reconoció la labor de la Diputación en materia de accesibilidad y deseó que “la Escuela Oficial de Idiomas que se ubicará en el edificio del antiguo Hospital Provincial sea perfectamente accesible”.

En cuanto a los ganadores, cada uno de ellos habló brevemente sobre su trabajo. Pako Pimienta, cuya fotografía recoge la espalda tatuada con alas de un jugador del equipo Mideba, recordó también su discapacidad y quiso dedicar el premio al protagonista de la imagen a quien calificó de héroe.

Pedro Javier Reig ha obtenido el segundo premio con un trabajo centrado en la arquitectura, concretamente en una rampa de acceso al Museo Provincial de Bellas Artes, “que permite la entrada al edificio no sólo a discapacitados permanentes, sino también a temporales o madres y padres con cochecitos. La fotografía demuestra que la accesibilidad también puede ser elegante.

Por último, Ana María Navas, recoge en la fotografía por la que ha recibido el tercer premio la imagen de su hija paseando a un perro discapacitado al que se le ha ha aplicado un artilugio para que pueda caminar. “Los niños no distinguen las diferencias, las discapacidades, por eso seguiré educando a mi hija en la igualdad”, dijo.

Los premios, por importe de 1.500, 1.000 y 500 euros se destinarán  para la compra de material y equipo fotográfico. Durante quince días permanecerá abierta en la Diputación una exposición con una treintena de fotografías participantes en el premio.