Un centenar de deportistas, 23 entrenadores y 5 árbitros obtuvieron la calificación de Alto Rendimiento en 2016

En total, cien deportistas entre los que se incluyen, entre muchos otros, olímpicos como los atletas Javier Cienfuegos y Álvaro Martín Uriol o la nadadora paralímpica Isabel Yinghua Hernández, junto a deportistas extremeños ya consagrados como la atleta Sonia Bejarano, el karateka Manuel o el ciclista Pedro Romero, así como promesas emergentes de nuestro deporte.

También forman parte de este extenso listado entrenadores reconocidos como Guillermo Olcina (triatlón), Antonio Fuentes (atletismo), Adolfo Gómez (voleibol) o Luis Cayetano Martínez (tiro con arco) y árbitros como el cacereño Luis Fernando Durán, premiado recientemente por la Real Federación Española de Atletismo por sus 24 años como juez, o el dombenitense Jesús Gil Manzano, internacional en fútbol.

Todos ellos se convirtieron por tanto en 2016 en beneficiarios de las cuestiones recogidas en el mencionado Decreto, tales como la posibilidad de obtener permisos retribuidos en horario laboral para asistencia a competiciones oficiales, la justificación de un 15% de las faltas de asistencia para aquellos que cursen estudios universitarios en Extremadura o la reserva para ellos de plazas en el Centro de Tecnificación Deportiva de Cáceres y en las residencias universitarios y no universitarias dependientes de la Junta de Extremadura.

Los deportistas, entrenadores y árbitros de alto rendimiento de la Comunidad Autónoma tendrán prioridad igualmente para acceder a los programas de especialización y tecnificación impartidos por federaciones deportivas extremeñas y el Centro Extremeño de Formación Deportiva (CEXFOD), a eventos y espectáculos deportivos y a la atención prestada por la Oficina Asistencial para Deportistas Extremeños de la Fundación Jóvenes y Deporte.

Del mismo modo, la Universidad de Extremadura facilita la conciliación de horarios lectivos y deportivos de quienes disfrutan de esta calificación, mientras que la Consejería de Educación realiza la adaptación de los planes de estudio para aquellos que sigan inmersos en la Educación Secundaria Obligatoria, siendo la Junta de Extremadura la encargada de poner en marcha los mecanismos necesarios para cualquier otra acción que fuera de interés para este colectivo, tales como beneficios en el acceso al mercado laboral o la en la relación con entidades de crédito.