El director gerente del SES afirma que la nueva redacción del Plan de Ordenación de Recursos Humanos es más flexible

Franco ha explicado que la respuesta de los agentes sociales ha sido variable y de los seis sindicatos representados “a cuatro les ha parecido bien, otros no están totalmente de acuerdo porque afecta también a la sección de guardia, la liberalización de guardias de mayores de 55 años y otros aspectos y hay un sindicato que se ha opuesto radicalmente porque piensa que en lugar de flexibilizar la medida anterior le impone más rigor”.

Franco ha explicado que en la redacción del Plan de Ordenación actual, “que está suspendida”, se establece que la jubilación sea a los 65 años “y solo excepcionalmente se pueda prolongar el servicio activo” y ha afirmado que desde el principio el SES ha planteado una redacción que no fuera tan restrictiva sino más flexible y que permitiera una prolongación de jornada al personal facultativo.

Ha comentado que a partir del año 2020 va a haber un número elevado de jubilaciones en todas las especialidades, tanto en medicina de familia como en las especialidades hospitalarias, es decir, “en número absolutos, del año 2020 al 2016 se van a jubilar unos 600 médicos de familia de una plantilla de 1.129 profesionales, con lo que podemos tener un problema importante de asistencia si no vamos previendo acciones de este tipo”.

En asistencia especializada en los hospitales se jubilarán unos 400 facultativos, pero el número absoluto es menos importante, ha explicado Franco, “y toma mayor importancia el número de determinadas especialidades en las que ahora hay carencias como pediatras, cirujanos vasculares, radiodiagnóstico, etc”.

En este sentido, ha dicho que aunque sea poco el número de jubilaciones en los próximos años, si a esto se une un número de plantilla menor y una escasez crónica de estos especialistas “hace que determinados servicios su permanencia pueda verse en peligro”.

El director gerente del SES ha asegurado que no hay ningún interés por parte de la Administración de prolongar la jubilación y hacerla forzosa hasta los 67 años y ha explicado que hay una legislación que va prolongando progresivamente la edad de esa jubilación.

“Nosotros lo que pretendemos es, con el consenso de los agentes sociales, darle cierta flexibilidad para que en determinados casos, cuando así sea necesario, ya se trate de un médico familia en la zona de Sierra de Gata o de un superespecialista en el Complejo Infanta Cristina, la Administración y la sociedad tenga un escape o una salida a la posible demanda o falta de facultativo por el exceso de jubilaciones”.