El escenario del teatro López de Ayala se ha vuelto a convertir en una plaza de toros para acoger a "Los Mirinda". A 50º C en el tendido y con una buena almohadilla para no dejarse las nalgas, han comenzado su corrida en las semifinales del concurso de murgas del Carnaval de Badajoz 2016.
Sin parar de abrevar, los pasodobles. El primero ha hecho referencia al gobierno, a los recortes en Sanidad y Educación, y al ciudadano que se desangra en la arena día sí y día también. Y un segundo pasodoble directo a la yihad y a su opresión. Y estos radicales no son los únicos culpables; detrás están también Europa y E.E.U.U, que difunden la religión musulmana sembrando el odio y el miedo, y que están más interesados por el petróleo de los países en conflicto que por sus habitantes. Es la primera vez en el concurso que se ha tratado el terrorismo yihadista señalando también a las grandes potencias. Por lo que se han llevado un aplauso más que merecido.
Los cuplés han llegado cargado de risas y picardías. En el primero nos han contado que están enganchaditos al móvil, que tienen más aplicaciones que pelos en sus patillas. Apps para todo, incluso para los momentos más íntimos con su "parienta". Y en el segundo, se han mofado de la moda yanqui, y es que todo lo americano se ha vuelto imprescindible en esta sociedad. Hay que dejarse de tanto McDonald's que al final nos vamos a quedar tontos. En el estribillo nos han dejado claro que les gustan los toros y una buena corrida.
El popurrí ha sido el de su actuación de preliminares: cuando esperan en la puerta del Hotel Río a un torero; lo que le gusta a una pija la feria de Sevilla; imitaron a los gemelos de Pekín Express. Y su punto más divertido cuando dijeron que Manolete en una corrida creó las manoletinas y Paquirri a Paquirrín, que se lo podía haber pensado antes. Esta plaza en febrero vive su mejor faena y aunque sea pequeña, la gente la hace siempre grande.
Actuación de la Murga Los Mirinda en la semifinal del Concurso de Murgas del Carnaval de Badajoz 2016
