Al ritmo de Dora la Exploradora y saludando a todos, se ha levantado el telón del teatro para recibir a la guardería Los Angelitos, aunque estos niños de angelitos tengan poco. Son los niños gorditos hijos de la Lola, más conocidos porque se comen la merienda del otro, los foskitos y las caracolas. Entre olor a Nenuco, patucos y pañales con sorpresas, estos pequeños diablillos nos dieron la bienvenida a la semifinal del concurso de murgas del Carnaval de Badajoz 2016.
El primer pasodoble ha ido dirigido al bullying, acoso físico y psíquico escolar, que lo sufren muchos niños. Y un segundo en el que han criticado los vaivenes que se trae el "no gobierno" que tenemos actualmente. Y es que no les están saliendo las cuentas, como a muchos españoles desde que empezó la crisis. Unos pasodobles muy reivindicativos y mejorados.
Como en la actuación anterior, los cuplés llegaron con el juego "veo, veo". Esta ronda de cuplés ha sido más divertida y ovacionada que la de preliminares. Un primero en el que hablaron de que a su padre se le alarga la vida cuando va a la playa y ve a las chicas en topless; y un segundo haciendo referencia a Gran Hermano 16 y a la relación entre Han, el chino, Aritz, el vasco. Y es que aunque el vasco fuera muy independiente, al final acudió al chino porque era el único que estaba abierto 24 horas.
El popurrí se ha mantenido intacto, excepto por la lista de la clase. A esta guardería se han incorporado el hijo de Sandro Rey, que le llaman el "bidente" porque solo tiene dos dientes; el hijo de Iker Casillas, que se parece a su padre porque no veas como canta cuando le cambian los pañales; y el más inútil, el hijo de Guti. La despedida se la dedican a su primer amor, Badajoz, y a su carnaval.
Actuación de la Murga Al Maridi en la Semifinal del Concurso de Murgas del Carnaval de Badajoz 2016.