Hay cosas en la vida que llegan en el momento justo. Ni antes ni después. Y cuando aparecen tienes la sensación de que realmente han existido siempre. Eso pasa con los grandes músicos y los grandes discos. Son como los niños, que llevan años revoloteando hasta que un día los miras y descubres que ya son adultos, que han crecido sin que te des cuenta y que su talento y su grado de madurez les permite emprender la mayor de las aventuras. Esa que consiste en grabar a fuego en la memoria del oyente una experiencia más allá de lo musical. Y en ese punto exacto, tras muchos ensayos, conciertos y formaciones diferentes, aparece esta banda con un sonido espectacular llamada Mohevian presentando su primer álbum “Catálogos de Universos Domésticos”.
La escena indie se va agitar de lo lindo con una banda española que con su primer disco da muestras de que sabe lo que quiere y que ha llegado para quedarse. Irrumpen en el panorama musical en el punto exacto de maduración que debe tener todo músico. Un repertorio muy
potente, con letras cargadas de simbología, que huyen de lo fácil. Una formación de cinco músicos en vivo (voz, guitarras, bajo, teclados y batería) capaces de sonar sobre cualquier escenario. Mohevian huye del garaje y junto a su productor Jaime Roldán apuestan por un sonido contundente y muy internacional, una producción muy cuidada que bebe de bandas como Interpol, Radiohead, Muse…
