La consejera de Economía e Infraestructuras afirma que el conocimiento científico es elemento indispensable para el desarrollo regional

En este sentido, ha señalado que se trata no sólo de una piedra angular para el progreso de Extremadura, sino también un factor que genera un impacto directo sobre el bienestar de los ciudadanos, por lo que para la Junta de Extremadura la ciencia, la investigación y la innovación es considerada como una ‘política determinante para nuestro futuro. Si se me permite la metáfora, es el carril de aceleración para que Extremadura avance posiciones en su particular carrera hacia la convergencia’.

La consejera ha realizado estas declaraciones durante su intervención en el Foro Innova Extremadura 2018, que se celebra hoy en el Centro de Cirugía de Mínima Invasión, en Cáceres, en el que se aborda la eficiencia como factor clave de competitividad desde cuatro conceptos: energía, equidad, ecología y economía.

“En el anterior Foro defendíamos la necesidad de un diálogo entre investigación, empresa y sociedad. Hoy, en éste, damos un paso más allá en la aplicación práctica de la ciencia hacia el beneficio social y ponemos la eficiencia como referente, ligada a la competitividad empresarial”, ha explicado en su intervención.

Asimismo, la titular de Economía e Infraestructuras ha reconocido públicamente la labor que ha desarrollado en este ámbito la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación en estos tres últimos años en los que ha dado un fuerte revulsivo al conjunto del sistema de ciencia y tecnología regional, que en la pasada legislatura sufrió un importante retroceso.

“El impulso de estos últimos años – ha resaltado - está suponiendo un repunte cuantitativo y cualitativo de la I+D+i en Extremadura. Estamos haciendo frente directamente a sus déficits y debilidades, y potenciando sus fortalezas”.

En su opinión, la aprobación del VI Plan Regional ha resultado decisivo para canalizar la participación de los centros científico-tecnológicos extremeños en el desarrollo de una estructura empresarial competitiva en I+D+i en la región. “Es el motor del cambio social y de la modernización del modelo económico regional que necesitamos para transitar hacia una economía sostenible”.

Para llevar adelante este propósito, la consejera Olga García ha señalado la puesta en marcha de instrumentos de participación público/privada que faciliten las relaciones entre los centros generadores de conocimiento y el tejido productivo, posibilitando la transferencia del conocimiento y la orientación de la investigación.
Además, para incrementar también la actividad de la I+D empresarial de la región, ha expuesto que se está apoyando la colaboración entre empresas en la búsqueda de soluciones comunes y promoviendo un entramado de empresas de base tecnológica.

Para todo ello, ha aseverado, se requieren decisiones estratégicas, de largo plazo, como las que se contemplan en el VI Plan regional, junto con una mayor robustez de nuestras capacidades científicas y tecnológicas.

Motivo por el que durante las tres últimas anualidades el presupuesto global del programa se ha incrementado en un 15%. Y en el proyecto de presupuestos para 2019, en el programa de I+D+i se prevé un incremento de más del 14% con respecto a la partida de este año.

En el trienio 2016-2018 se han invertido 106 millones de euros en las diversas convocatorias de ayudas públicas para las infraestructuras científicas y estructurales de los centros de investigación.

Asimismo, se ha aumentado un 2,3% los recursos humanos, se y el personal contratado en un 8,4%, hasta alcanzar los 3.338 empleados en el sector público. Según los datos del Catálogo de Grupos de Investigación de Extremadura, actualmente existen 217 grupos catalogados que incluyen a un total de 1.738 investigadores y 201 dentro del epígrafe de personal en formación. Este último colectivo se ha duplicado en apenas dos años.

Con respecto a las empresas extremeñas, en su mayoría pymes y micropymes, la consejera ha destacado las convocatorias en los dos últimos años por importe de 46,4 M€, financiándose 72 proyectos en 2016 y 105 en 2017.

Olga García ha reivindicado una mayor cultura científica y tecnológica entre la ciudadanía, en general, y ha instado a las empresas a que trabajen por asentar esa cultura en sus organizaciones como factor crítico para la supervivencia y el crecimiento empresarial en Extremadura.