Francisco J. Lema Bretón, de 36 años de edad, ha muerto después de arrojarse desde la ventana de un cuarto piso en la calle Cartago de Córdoba a las 10.00 horas de esta mañana. Este antiguo albañil en paro era activista de la plataforma Stop Desahucios, estaba casado y tenía con una hija.
Carta de la PAH de Córdoba.
Compañeros y compañeras,
Nuestro compañero Fran Lema Bretón no ha podido soportar más la presión criminal de quienes desahucian al pueblo.
Sabíamos que Fran era vulnerable. Su cuerpo grande encerraba un corazón noble incapaz de hacerle daño a nadie… salvo a sí mismo.
Fran construyó su casa con sus manos, pero pidió un préstamo para los materiales.Cuando llegó la crisis, que es una grandísima estafa, Fran dejó de trabajar y no pudo ya hacer frente a su hipoteca.
Los CRIMINALES banqueros forzaron un “acuerdo” que fue cruel y despiadado.
Cuando entró a formar parte de la Plataforma STOP DESAHUCIOS de Córdoba, Fran ya había entregado las llaves de su casa y había firmado un acuerdo con el banco. ¿Un acuerdo?, ¡otra estafa!
CajaSur (Kutxa Bank) y Caja de Badajoz son las entidades responsables.
El gobierno que defiende a la dictadura del capital, es también responsable.
Quienes ven la injusticia y no hacen nada, también tienen su parte de responsabilidad.
La gota que colmó el vaso: una carta de la agencia tributaria pidiéndole 400 euros.
Y Fran ya no pudo más.
Fran nos preocupaba, era muy grande, pero muy frágil. Quisimos que un compañero psicólogo de la Plataforma lo atendiera y así se hizo. Le conseguimos también una pequeña subvención para el alquiler y el otro día en nuestra asamblea parecía que estaba bien. Pero era difícil saber como estaba él, era un compañero reservado y le decíamos que eso no podía ser. Que hay que soltar lo que se tiene dentro, que si permanecemos callados, eso nos mata por dentro.
Y Fran no pudo más.
No te olvidaremos Fran.
Un abrazo a tu mujer y tu hija.
Hoy viernes 8 de febrero a las 7 de la tarde en la fuente del bulevar Gran Capitán, esquina Ronda de los Tejares, nos concentraremos en su memoria y te pedimos que acudas.
No te olvidaremos Fran y no olvidaremos JAMÁS a quienes te empujaron. Pagarán por ello.
Ya no puedo escribir más…
¡Acudid!