Este pasado fin de semana, desde el viernes 14, al domingo 16 de septiembre, ha tenido lugar en el Norba Club de Golf de Cáceres un encuentro entre dos equipos, uno de jugadores de Madrid y otro integrado por jugadores de Extremadura.

Los actos comenzaron con un campeonato de approach nocturno y siguieron con una degustación de jamón ibérico de bellota que estaba para chuparse los dedos (jamón extremeño, por supuesto) y cortado por un profesional, porque el corte es muy importante para degustarlo con toda su intensidad. Siguió un concierto del grupo cacereño Spanglish en la terraza de verano de la casa club, que se prolongó unas cuantas horas. Al día siguiente, algunos lo notaron en su rendimiento golfístico.

También se habían organizado actividades para los niños y para los acompañantes (que disfrutaron de una visita a nuestra Ciudad Antigua).

Comenzó el sábado con una competición de approach (golpe corto de aproximación al hoyo), la presentación del torneo, con asistencia de autoridades y patrocinadores, recogida de uniformidad (los extremeños de verde el sábado y de rojo el domingo), un clinic de putt a cargo del magnífico profesional del club Horacio Cabrera Díaz (que está realizando una maravillosa labor con los niños del club) y por fin se inició la competición por equipos. Puesto que eran numerosos los participantes (66 por cada equipo) se salió al toque de bocina de todos los 18 hoyos a la vez, e incluso se doblaron algunas salidas. Los handicaps estaban limitados a 26 golpes para los caballeros y 32 para las damas. Pasamos un poco de calor porque desde las 14 horas a las 19 pegaba el sol con ganas. Una ligera brisa hacía más llevadero el recorrido y sobre todo, la intensidad de las partidas. Nosotros, los de Cáceres, ya conocemos el campo (que se había cuidado durante todo el verano para que estuviera a punto y con buen aspecto) pero los forasteros comprobaron la dureza del recorrido en la parte de arriba. Mucho más suave es el tramo entre los hoyos 1 al 9, aunque castiga a quien se sale del buen camino. El ambiente de compañerismo, lo mejor, pues al tratarse de una competición no oficial sino amistosa, fuimos buenos asesorando a los visitantes sobre las dificultades de cada hoyo.

Durante el recorrido, lo más solicitado fue el punto de aprovisionamiento dispuesto en cada uno de los recorridos, de tal modo que agotamos las existencias de bebidas, comida y fruta a pesar de que las previsiones fueron muy generosas. Por la noche tuvo lugar el cóktekl de gala en la terraza de la pérgola que es un lugar maravilloso para este tiempo todavía veraniego. Se terminó con la entrega de trofeos y el sorteo de regalos ofrecidos por los patrocinadores (Indiba, Gourmet, Multiópticas Karma, Seranco, Doble Dúop, 100 Montaditos, Caddie, Allsol, Avante, Deportes Ruiz, Viajes Coria Tours, Viassa, El Armario de Afrodita, Caja Extremadura, Promosport, Hotel Cáceres Golf, Mármoles Pedro Trenado, Huno Pago de los Balancines, Ricopy, Fundación Valhondo, Buengolpe.com, César David, Extremadura Gourmet y Gimnasio del Maestro Kim).

A la mañana siguiente salimos a las 9 (algunos jugadores con el piloto automático puesto, ya que no habían dormido lo suficiente la noche anterior) también de todos los hoyos aunque esta vez cada jugador tenía su contrincante de match-play aunque la partida fuera de 4 para aprovechar el campo. El resultado final favoreció a los extremeños por una diferencia aproximada de 75 a 50 puntos, aunque ya digo que eso fue lo de menos. Lo importante es que los visitantes se fueron encantados del trato recibido y prometieron volver el año próximo.

Nos despedimos compartiendo un cóctel que completaba el avituallamiento recibido durante el juego (la chapata de jamón fue muy valorada por todos) y se hizo entrega a los participantes de un trofeo recuerdo de su participación.

Con esta actividad no sólo se promociona el campo de golf, para que lo conozcan los madrileños a los que puede resultar más cómodo hacer un desplazamiento de 3 horas para jugar aquí, que esperar en los saturados campos de su comunidad, sino que se da a conocer la belleza de la ciudad que animará a los visitantes a volver con su familia.