Los Príncipes de Asturias han presidido este mediodía en Cáceres una sesión de trabajo con los casi ochenta directivos del Instituto Cervantes que participan desde ayer lunes en la Reunión Anual de Directores. Don Felipe ha destacado que el español “es el producto de nuestro país con mayor demanda en el resto del mundo” y “un valor en auge”, especialmente en zonas de Asia y el Pacífico. Para aprovechar las oportunidades que abre el idioma “tal vez sea necesario articular nuevas estrategias”, como las reformas que prepara la institución con el objetivo de “adaptarse a la nueva situación”.

Unas reformas que se analizan en esta cumbre anual y que, en palabras del Príncipe, cuentan con un punto de partida “inmejorable”, ya que “el acervo de métodos y técnicas didácticas del Instituto Cervantes para la enseñanza del español es el más importante del mundo”. Pese a los “momentos especialmente difíciles” por los que atravesamos, ha dicho a los directores, “disponéis de grandes ventajas”, entre ellas que el español sea “una lengua de cultura al menos desde el siglo XIII”.

Tras agradecer la posibilidad de “sumergirnos en el Instituto Cervantes” como ya hicieron en Reuniones Anuales anteriores, don Felipe ha mostrado su apoyo a la “gran meta” que persigue la institución: “iberoamericanizarse”. Un “camino iberoamericano, que suma talento, diversidad cultural y variedad lingüística”, ha dicho, y que a la vez nos aporta “una fuerte identidad” en la que está presente el pluralismo y el “saber gestionar la convivencia dentro de la complejidad”.

El director del Instituto, Víctor García de la Concha, ha abierto la sesión de trabajo exponiendo los asuntos que se abordan en unas jornadas que comenzaron ayer lunes y concluirán el jueves en Mérida (Badajoz). Tras las palabras del Príncipe y del secretario general del Cervantes, Rafael Rodríguez-Ponga, han intervenido sesión los directores de los centros de Casablanca (Marruecos), Estambul (Turquía), París (Francia) y Tokio (Japón). Cada uno de ellos ha explicado la situación de la lengua española y de la cultura hispanohablante en los respectivos países. A continuación los directivos del Instituto han mantenido un coloquio con los Príncipes.

La sesión de trabajo se ha celebrado a puerta cerrada durante más de una hora en la iglesia del antiguo monasterio San Francisco el Real, que comenzó a construirse en 1472. Las principales autoridades regionales y locales, encabezadas por José Antonio Monago, presidente de la Junta de Extremadura, se han acercado al Complejo Cultural San Francisco que rodea ese antiguo templo para saludar a los Príncipes.

En la reunión de esta tarde –la tercera de las siete previstas en el programa- se abordarán la agilización de los Diplomas de Español como Lengua Extranjera (DELE) que certifican el conocimiento del idioma, y la promoción del Aula Virtual de Español (AVE), un programa de cursos para aprenderlo por internet.

Clausura por el ministro Wert

Mañana miércoles habrá otras dos reuniones de trabajo, y a primeras horas de la tarde los directores se trasladarán a Mérida (Badajoz), ciudad que al igual que Cáceres es Patrimonio de la Humanidad. En la ciudad que en época romana se llamó Emérita Augusta se desarrollará el resto de las Jornadas, que serán clausuradas el jueves por el ministro de Educación, José Ignacio Wert.

Por su parte, el secretario general del Instituto Cervantes, Rafael Rodríguez-Ponga, participará mañana en Badajoz en la mesa redonda “Brasil, el coloso de la lusofonía. Cultura y negocios” junto con el catedrático de la Universidad de Extremadura Juan M. Carrasco y los directores del Instituto en las ciudades brasileñas de Belo Horizonte, Brasilia y Porto Alegre.

La Reunión Anual se celebra con el patrocinio de la Junta de Extremadura, la Diputación Provincial de Cáceres, el Ayuntamiento de Cáceres, la Diputación de Badajoz, el Ayuntamiento de Mérida y la Universidad de Extremadura. También colaboran CEXECI (Centro Extremeño de Estudios y Cooperación con Iberoamérica), Méridas del Mundo, NH Hoteles, Alsa, Iberia, Paradores y Corderex.